martes, 1 de febrero de 2011

Poética

Para tu gestos de seguras aguas
o para el resto
de acantilados que construyen
tu rostro escribo
y no es de mar de lo que hablo
sino de aquella cara de atildadas siluetas
y sombras como puños
que un instante en mis manos fueron para no serlo
acaso nunca más

no había dicha entre mis dedos sólo
atardecer suave
y un presagio de irse mis manos como cera
caliente de tus labios eran moldes
y luego cobertores de todos tus fracasos
aún así nada es cierto en el recuerdo
pues crecen las metáforas y entre su azul mentira
todo se queja inquieto nada cede
un horizonte antiguo muda su piel y es borde
o simetría de tus labios toca
con maneras de avaro
la única luz que muere en la distancia 


 

 

 

 

 

 

No muevas la mano, fotografía de Rußen en Flickr bajo licencia CC

No hay comentarios:

Publicar un comentario