miércoles, 2 de febrero de 2011

Crónica de gángsters (Uno)

Como entre las camisas viejas la que más nos gustaba
nos envuelve en su orín de naftalina
¿quién no ha buscado nunca entre los cuerpos
disímiles que pueblan su abufonado mundo
esa mujer en quien abandonarse
deshacerse del peso de su culpa?
pecado original es el amor y no nos damos cuenta
del olorcillo a viejo que desprende cualquiera nueva amada
la sensación confusa de estar reconociéndonos
con menos barba o el abrigo gris de hace pocos años
con otro nombre en otra alcoba

todos los cuerpos se parecen como
las cajas chinas perseguirte
tiene algo de recuerdo
algo de la inocencia del primer
impacto que un perfil me provocase
aunque las dunas se hayan vuelto coches
o las olas cuarteles
y la playa ciudad y cristaleras
somos el mismo error y lo que amamos siempre lo que amamos

 


























Camisa, fotografía de Raúl Urbina en flickr

No hay comentarios:

Publicar un comentario